Evaluación del espacio, estilo decorativo y preferencias del cliente

Muestra de acabados (estuco veneciano, efecto mármol, metalizado, etc.)

Reparación de imperfecciones y aplicación de imprimaciones

Garantizar una base lisa y adecuada para la adherencia del estuco

Técnicas artesanales con llana o espátula según el tipo de estuco

Revisión del estado de la fachada: grietas, humedades, desprendimientos, etc.

Identificación de patologías y propuesta de tratamiento adecuado.

Limpieza con agua a presión o tratamientos específicos (antimoho, antifúngico).

Reparación de fisuras, sellado de juntas y aplicación de imprimación.

Selección del tipo de corcho (natural, decorativo, acústico) o moqueta (lana, sintética, modular).

Elección de colores, texturas y acabados según el uso del espacio.

Limpieza, nivelación y secado de la superficie.

Aplicación de imprimación o adhesivos adecuados al tipo de material.

Corte y colocación precisa, cuidando juntas y uniones.